Estados Unidos limita visita a Groenlandia tras tensiones por intereses anexionista

El ministro de Exteriores de Dinamarca, Lars Løkke Rasmussen, ha manifestado su satisfacción ante la decisión de Estados Unidos de restringir su visita a Groenlandia exclusivamente a la base militar de Pituffik. Esta rectificación en los planes se produce en un contexto de tensiones suscitadas por las insinuaciones anexionistas de Donald Trump. Inicialmente, el vicepresidente de EE.UU., JD Vance, tenía previsto viajar a la base junto a su esposa, Usha Vance, pero también se esperaba su presencia en Nuuk, la capital groenlandesa, y en la tradicional carrera de trineos tirados por perros, lo cual generó incomodidad en las autoridades danesas y groenlandesas.
La controversia se intensificó debido a la intención de Usha Vance de viajar acompañada por el asesor de seguridad Mike Waltz, sin una invitación formal por parte de Nuuk, en un momento delicado en el que Groenlandia se encuentra en negociaciones para formar gobierno tras recientes elecciones. El presidente autonómico en funciones, Múte B. Egede, calificó la visita de “agresiva”, mientras que la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, la consideró una “presión inaceptable”. La llegada de dos aviones militares estadounidenses con vehículos de seguridad como preparativo para la visita también contribuyó al malestar general.
Finalmente, Estados Unidos reconsideró su agenda, limitando la visita a la base de Pituffik y cancelando la participación de la esposa del vicepresidente y su asesor. Rasmussen interpretó esta decisión como una “desescalada” por parte de EE.UU.. A pesar de este cambio, JD Vance defendió que la administración de Donald Trump busca “revitalizar la seguridad” de Groenlandia, argumentando que es “clave para la seguridad global”.