5 de diciembre de 2025 2:49 AM

¿Qué le pasa al Glorioso?

La noche cae sobre el béisbol dominicano y, junto con ella, una pregunta que resuena con más fuerza que cualquier batazo: ¿qué le pasa al Glorioso?

El equipo que en las últimas tres temporadas levantó dos coronas y se quedó a un paso de otra, hoy vive un momento oscuro, inesperado… casi inexplicable.

Los azules, acostumbrados a caminar con la frente en alto, llegaron a esta campaña reforzados con nombres que, en años recientes, habían sido garantía de rendimiento. Hombres que la fanaticada recibió entre aplausos, confiada en que repetirían aquella fórmula ganadora. Pero el guion no ha sido el mismo. Lo que antes era seguridad, hoy luce como incertidumbre. Lo que antes era colmado de alegría, hoy es un murmullo de frustración.

A eso se suma la salida del cerrador histórico, el líder absoluto en juegos salvados. Su ausencia se siente como un hueco que nadie ha logrado llenar, un último out que el equipo no ha podido atrapar.

El panorama actual duele: récord de 9-16 y cinco derrotas consecutivas en una semana que ha puesto a prueba la fe del fanático azul. La pelota no está picando a favor, el bateo se ha ido por rachas cortas y el pitcheo no encuentra estabilidad. Todo ocurre mientras el pueblo azul observa, suspira y se cuestiona.

Porque al final, la pregunta sigue en el aire, cargada de historia, orgullo y desespero:

¿Qué le pasa al Glorioso equipo del pueblo?