Freddie Freeman puso punto final a una batalla épica al disparar un jonrón en la parte baja de la decimoctava entrada, mientras Shohei Ohtani volvió a tener una noche de ensueño con dos cuadrangulares en otra actuación histórica. Con esa combinación letal, los Dodgers de Los Ángeles superaron 6-5 a los Azulejos de Toronto este lunes, tomando ventaja 2-1 en la Serie Mundial.

El batazo decisivo de Freeman fue ante Brendon Little, enviando la pelota a 406 pies por el jardín central y cerrando un partido que se extendió por 6 horas y 39 minutos, igualando el récord de más entradas jugadas en la historia del Clásico de Otoño.

Por su parte, Ohtani protagonizó otra jornada inolvidable: conectó dos jonrones, acumuló cuatro extrabases y empató un registro de 119 años de antigüedad en las Grandes Ligas. Después de sumar cuatro hits en las primeras siete entradas, el japonés fue caminado en cinco ocasiones consecutivas, convirtiéndose en el primer pelotero en 83 años que logra embasarse nueve veces en un mismo encuentro, y el primero en hacerlo en una postemporada.

“Lo importante es que ganamos”, dijo Ohtani, quien destacó que más allá de sus récords, su enfoque está en el siguiente compromiso. Su hazaña llega justo antes de su primera apertura como lanzador en una Serie Mundial, programada para este martes por la noche.

En la primera entrada, Ohtani abrió con un doble de regla al jardín derecho, y luego amplió su dominio con un cuadrangular solitario ante Max Scherzer en la tercera. Más tarde, impulsó otra carrera con un doble ante Mason Fluharty y empató el marcador en el séptimo con su segundo jonrón, un batazo de 401 pies.

Toronto intentó evitar más daño al otorgarle boletos intencionales en cuatro turnos seguidos (novena, undécima, decimotercera y decimoquinta entradas), una estrategia que funcionó momentáneamente hasta que Freeman terminó con todo.

Con su desempeño, Ohtani se unió a figuras legendarias como Babe Ruth al ser el único jugador con más de un partido de al menos 12 bases alcanzadas en una misma postemporada. Además, ya suma seis jonrones y cinco remolcadas en los primeros tres juegos de la Serie Mundial, consolidándose como el hombre grande de Los Ángeles.

El espectáculo de Ohtani, junto con el poder decisivo de Freeman, mantiene a los Dodgers a las puertas de un título que podrían celebrar en casa, algo que no logran desde 1963.